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Curazao y San Martín, que junto con Bonaire, Saba y San Eustaquio formaban las Antillas Neerlandesas hasta 2010, utilizaban el florín antillano como moneda oficial. Cada céntimo se divide en 100. Las islas de Bonaire, Saba y San Eustaquio pasaron de utilizar el florín a utilizar el dólar el 1 de enero de 2011. El florín caribeño iba a sustituir al florín antillano en Curaçao y San Martín, pero las conversaciones para crear un banco central independiente para Curaçao suspendieron esos planes. La entrada en vigor del nuevo florín estaba prevista para el primer semestre de 2021, cuando el Banco Central lo anunció por primera vez en noviembre de 2020, pero se pospuso en varias ocasiones.